La política del lenguaje
Hace ya mucho que las confrontaciones políticas se juegan también en el campo del lenguaje; desde el siglo pasado, cuando a alguien se le ocurrió cambiar los explícitos “Ministerios de Guerra” por los más elusivos “Ministerios de Defensa”, y aún antes, cuando a los territorios militarmente “ocupados” se les atribuyó la beneficiosa condición de “liberados”.