Durante los primeros nueve meses de 2025, la lista de espera de la dependencia en España ha aumentado en 13.695 personas, hasta situarla en un total de 284.020. Mientras tanto, durante este mismo tiempo más de 25.000 personas han fallecido esperando ayudas en las listas de espera; es decir, han muerto 93 personas al día, una cada 15 minutos. En la España del sanchismo, el tiempo medio de espera de los dependientes para recibir ayudas de las administraciones públicas es de 349 días, 15 más que al empezar 2025. Mientras, Sánchez se vuelca en Gaza (afortunadamente).
Son datos del informe de la Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales que preside José Manuel Ramírez Navarro, realizado a partir de los datos oficiales del gobierno hasta el 1 de octubre de 2025, valorándolos de manera objetiva, sin dejar de contar a nadie que esté esperando respuesta de la Administración y con los mismos criterios que el Observatorio utiliza habitualmente.
Es decir, con los datos del Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 que dirige el primero podemita y luego errejonista y masista Pablo Bustinduy, a finales de septiembre de 2025 hay 284.020 personas en listas de espera, de las cuales 133.414 se hallan esperando valoración y 150.606 en cola para recibir las prestaciones y servicios que tienen reconocidos.
En definitiva, se trata de 284.020 personas en listas de espera que han solicitado ser valoradas y atendidas por su situación de dependencia y están esperando ser valoradas, que se haga el PIA o recibir de manera efectiva la prestación o servicio al que tengan derecho. “Parece cruel no tener en cuenta parte de estas 284.000 personas, que no solo son una cifra, sino seres reales, junto a sus familiares, que están esperando durante meses una respuesta de la Administración”, afirma el presidente de la Asociación, José Manuel Ramírez.
En ese sentido, cuando el Ministerio rebaja la cifra de desatención, “su” lista de espera se refiere exclusivamente a aquellas personas con las que la Administración no están cumpliendo la Ley, que establece en 180 días el plazo máximo para recibir la prestación o servicio que tengan reconocido. Por si fuera poco, en los últimos nueve meses no solo no se redujo el tiempo de espera, sino que aumentó de 334 días a principio de año a 349 en septiembre de 2025 (15 días más).
El seguimiento continuado de los datos oficiales por la Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales demuestra que, año a año, se bate el récord de personas atendidas (beneficiarias del Sistema), que es lo que proclaman las comunidades autónomas y el ministerio para justificar su triunfalismo y ocultar esta realidad. Ahora bien, es lógico que, mientras haya decenas de miles de personas en las listas de espera, cada vez aumente más el número de beneficiarias. Aunque sea con servicios low cost: en los últimos nueve meses han descendido las plazas residenciales (-804) y las de centros de día (-969).
Debido a esta situación, 25.060 personas fallecieron en las listas de espera de la dependencia en lo que va de año: 13.713 esperando ser valoradas y otras 11.347 a la espera de recibir la prestación a la que tenían derecho. Dos de cada tres personas fallecieron en estas cuatro comunidades: Cataluña (6.851), Andalucía (5.292), Comunidad Valenciana (2.290) y Canarias (1.904).
Para Gaza sí ha dinero (afortunadamente)
En definitiva, para la labor social en España el sanchismo apenas tiene propuestos, pero las ayudas sí afloran, afortunadamente, para la franja de Gaza y la política internacional de Pedro Sánchez: Exteriores acaba de activar un nuevo plan para atender las necesidades humanitarias en Gaza a través de la AECID.
Desde el 7 de octubre de 2023, la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) ha movilizado más de 50 millones de euros en ayuda humanitaria a Palestina. Tras el acuerdo anunciado esta semana para un alto al fuego y el retorno de rehenes, España va a participar activamente a través de esta agencia en el esfuerzo de la comunidad internacional y de los actores humanitarios para incrementar exponencialmente la entrada y distribución de ayuda.
Además del trabajo con el sistema de Naciones Unidas incluida UNRWA, organismo que ya ha recibido este año contribuciones de la AECID por valor de 19,5 millones de euros, la agencia va a incrementar su apoyo a las organizaciones locales: en los próximos días se movilizarán 850.000 de euros para la Media Luna Roja Palestina y la ONG local Al Awda.
Además, se espera la próxima ejecución de tres millones de euros a ONG españolas procedentes de la convocatoria extraordinaria de Acciones humanitarias para Palestina: Acción contra el Hambre, Médicos del Mundo, Cruz Roja Española, Alianza por la Solidaridad y Save the Children.
Lo anterior se une a la movilización de fondos del Fondo Central de Emergencias de la ONU (CERF), al que España ha contribuido este año con 4,5 millones de euros de financiación no marcada, para reforzar la capacidad de respuesta de Naciones Unidas en esta nueva fase.
Según el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación que dirige José Manuel Albares, sólo en 2025, el presupuesto destinado a esta crisis roza los 21,5 millones de euros. “Estas cifras son provisionales y con previsión de incremento antes del fin de este año, en respuesta a la situación que se abre tras el alto el fuego”, afirman medios diplomáticos.