Cuando solo quedan polvorones de limón, empieza lo duro
Retorna la rutina. Esto es, vuelve la vida que no es otra cosa que lo que ocurre cuando no estamos de fiesta. La vida tiene sus momentos donde llegan alegrías o penas (recuerdo, ahora, a Javier Castro, amigo y contertulio que “se nos ha muerto como el rayo…, compañero del alma, compañero”).