El vacío de poder, ese agujero negro que se lo traga todo, es lo que más temen los banqueros, los grandes empresarios y hasta los grandes ladrones de guante blanco. Pero, ¿qué es el vacío de poder? ¿Es tangible, medible, bebible, respirable, sonoro, tiene magnitudes el vacío de poder?
El Duende Satírico ha estado indagando durante años en investigaciones profundas y, aunque el vacío de poder se escondía y era escurridizo y modificaba su forma para no ser hallado, El Duende lo consiguió: lo ha encontrado y se lo muestra a todos los lectores de El Satiricón.
Vean, admiren, toquen -digitalmente hablando, claro- lo que más temen los banqueros y los poderosos que tanto tienen que temer, es decir, que perder: el vacío de poder. Y es que resulta que el coche está bien aparcado: queda fuera de las dos señales de limitación.