Cualquier tiempo pasado…
Una de las actividades que no dan abasto en este tiempo de pandemia es la de búsquedas genealógicas. Y no tanto en rastreo de presuntos e inexistentes blasones ni de ADN que resuelva problemas genéticos, como por el simple placer de reencontrarse con el pasado, de saber de ascendientes remotos y conocer historias familiares.