Sursum Corda, decía el de la sotana desde el altar o desde el púlpito, y los fieles que ya sabían que Sursum Corda significaba algo así como «arriba los corazones», respondían a coro: «Lo tenemos [el corazón] levantado hacia el Señor». Eso lo sabe muy bien uno de los actuales vocales del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), el socialista Álvaro Cuesta, cuyo laicismo militante es proverbial.
Tan proverbial es su anti-religiosidad, que en uno de esos tediosos comités ejecutivos del PSOE en la etapa de Rodríguez Zapatero, quien fuera ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, también conocido por sus excelentes caricaturas, le hizo ésta que les mostramos a continuación.
Para mayor burla-burlando, López Aguilar dibujó a Álvaro Cuesta hasta con tiara y roquete de obispo y con la leyenda «Ánimo, Alvarete, Sursum Corda (levantemos el corazón)».
Simpático dibujo, sin duda, y simpática dedicatoria.