El juez de la Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón, ha denunciado ante la policía y ante el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) la campaña de «desprestigio personal y profesional» e «intimidación» que ha empezado a sufrir en las redes sociales y en ciertos medios de comunicación vinculados a Podemos, que le sitúan en una situación de indefensión y de descrédito profesional. El juez dice sentirse ‘señalado’ por haber pedido al Supremo la imputación de Pablo Iglesias.
Así se recoge en un escrito dirigido al presidente del CGPJ, Carlos Lesmes, y publicado por el diario El Mundo, en el que García Castellón denuncia la campaña pública que se ha iniciado contra su persona en medios de comunicación y en redes sociales desde que el miércoles hizo pública la exposición razonada elevada al Supremo por la que se somete a su consideración la investigación de dos aforados podemitas, el vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias, y la vicepresidenta tercera del Congreso de los Diputados, Gloria María Elizo, así como de otras cuatro personas.
García Castellón explica en su escrito que esa campaña pretende restar credibilidad y validez a los argumentos expuestos, deslegitimar el ejercicio del poder judicial y a sus magistrados e intimidar a los jueces que puedan tomar decisiones que afecten a los autores de la campaña, además de difundir la idea de que la exposición no es fruto de su convicción jurídica sino de «una suerte de estrategia política de mayor alcance que buscaría debilitar a una organización política».
El magistrado pide amparo al CGPJ e indica que los mensajes contra él son «repetidos y amplificados por muchos de los dirigentes» de Podemos, entre ellos «algunos miembros del Gobierno de la Nación, que desde la visibilidad propia del papel institucional que representan y la atención que reciben de los medios, señalan de forma directa a este magistrado y sabiendo la repercusión que sus palabras pueden tener, le colocan en una situación de absoluta indefensión y descrédito profesional». Adjunta la denuncia presentada ante la Policía por la naturaleza y la gravedad de los mensajes vertidos contra su persona y que podrían revestir carácter de infracción penal.
Entre los mensajes que ha denunciado el juez de la Audiencia Nacional se encuentran, por ejemplo, «hablar de agredir a un cabrón de juez García Castellón por sus ideologías del PP es la mejor solución porque yo detesto esa gente bastarda de la política por sus ideologías del PP. Ya sabemos que fue condicionado por eso hijo de puta», «este es un hijo de puto franquista que viene de familia burguesa. A este cabrón hay que cocerlo y ya está» o «García Castellón es un juez un pelín hijo de puta…».