El Gobierno dice que las concertinas son legales y que las mantendrá en las fronteras de Ceuta y Melilla.

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, mantendrá contra viento y marea las concertinas en las vallas fronterizas de Ceuta y Melilla. Así se lo ha asegurado por escrito al diputado de CiU Antoni Picó, que había preguntado al Gobierno sobre las alternativas que se estarían estudiando para sustituir las concertinas en las vallas fronterizas y si creía el Ejecutivo que las medidas disuasorias físicas, como las concertinas, son el mejor mecanismo para hacer frente a la inmigración irregular.

En su respuesta, que no deja lugar a dudas, el Ministerio del Interior asegura que «el uso de concertinas en España respeta la normativa vigente en el ámbito nacional y en el europeo» (sic) y añade que «se emplea tanto en las distintas Instituciones públicas de la Unión Europea (UE), tales como en las ciudades sede de las Instituciones de la UE como Bruselas y Luxemburgo» (sic).

El Ministerio del Interior sostiene que los datos anteriores están corroborados por las declaraciones de la Comisaria Europea de Asuntos de Interior «al afirmar que cada Estado es autónomo para implementar las medidas que considere necesarias en la defensa de sus fronteras» (sic). Y a ese respecto, el Gobierno de Rajoy se muestra taxativo al defender su uso junto a otras alternativas similares: «Las concertinas no son la única medida de seguridad pasiva desplegada en los perímetros fronterizos en Ceuta y Melilla, disponiéndose asimismo de mallas antitrepa«. Es decir, que se van a mantener caiga quien caiga.

En su pregunta, el diputado nacionalista catalán había señalado que el comisario de Inmigración de la Unión Europea sugirió que el Ejecutivo comunitario no apoya el uso de concertinas en las vallas fronterizas de Ceuta y Melilla «aunque no esté prohibido por la legislación de la UE», y que había recomendado a España que buscara medidas alternativas para frenar la inmigración irregular.