Solo medio susto y el canadiense estúpido
Durante décadas los alemanes nos habían procurado estabilidad. De unos años a esta parte, sin embargo, tienen por costumbre tenernos en vilo. Anoche, sin ir más lejos. Finalmente, la cosa ha quedado en medio susto, aunque habrá que ver si las deseadas negociaciones de una coalición de garantías ofrecen o no esa estabilidad.