Socialistas madrileños, disolveos

Estimados y estimadas socialistas madrileños. Pelillos a la mar. En un momento en que se amenazan los derechos políticos, todos debemos colaborar. Así que he tomado la iniciativa: he buscado un sacerdote que os ofrece una iglesia en el extrarradio, oscura y cutre, como corresponde, para vuestras reuniones clandestinas.

El Aquelarre de Sevilla

Más allá de algunos detalles, es fácil elucidar qué ha pasado con Juan Lobato. Hace algunos meses, Díaz Ayuso le dijo al exportavoz socialista en la CAM “usted no es un delincuente, así que le queda poca vida en el PSOE”. Sonó como una bofetada pero era una premonición.

Lobato, un notario y el guardia civil

Dice en público el teniente general que se ocupa de la inteligencia –sí, les parecerá un oxímoron, tras escucharle- que necesitamos gente como Aldama que “resuelva cosas que nosotros no podemos resolver”. No sé si la cita la aprendió de Roldán, el venal exdirector general del Cuerpo, o de los inventores de la “policía política”,…