Qué felices seremos viviendo, sin Código Penal

Hasta los salvajes en sus montañas tenían leyes, decía Walter Scott en Ivanhoe, como recordarán ustedes de sus lecturas infantiles. Luego, la burguesía ilustrada con la mala, malísima intención, Marx lo dejó claro, de proteger los derechos de propiedad y el orden burgués, como todo el mundo sabe, inventó el Código Penal.

Armengol, la patria se lo pide

Sabiendo que las mascarillas eran “fake”, no se correspondían a lo pedido, el gobierno balear pagó. Sabiendo lo mismo, certificó la calidad de la empresa suministradora y, por supuesto, emitió informe positivo ante los fondos europeos. Tres fiscalías investigan a la presidenta del Congreso, una de ellas europea.

El justiciero populista y repartidor de carnés

Es que el prócer estaba liado y todo se pone a pasar los mismos días. Así, no hay quién gobierne. El prócer estaba en Marruecos y no se pudo pasar por Barbate; luego, en lo de Valencia, es que estaba en París. No fue al Mobile porque a los nuevos mejores amigos no les gusta…

Cuando nadie conoce a nadie

¿Quién es ese Koldo, susurran en Ferraz? Algún o alguna despistado dice, antes de recibir un codazo, “no será aquel que dormía tras las cortinas”. Para nada, le contestan, acompañando el codazo, ése nunca estuvo aquí. Sí; en el PSOE han llegado a ese momento en que nadie conoce a nadie. Los senadores y diputados no…

El extraordinario caso del portero del prostíbulo

“No había en el pueblo un oficio peor considerado y peor pagado que el de portero del prostíbulo. Pero ¿qué otra cosa podría hacer aquel hombre?” (Bucay, J. 2017). No estaba el emprendedor muchacho para trasladar herramientas como el personaje de Bucay. Así que el joven, de nombre Koldo, estando en el lado del muro…

Feijóo se toma el trago y Sánchez alquila el partido

Pues menos mal que había partido, si no el PP barre a la izquierda por décadas, si no lo ha hecho ya. Es divertido que la misma noche electoral, un minuto después de conocerse las primeras encuestas, resultara que el periódico portavoz del progresismo global, animador del “hasta el final”, nos comunicara que, en realidad,…

Rebelión en la granja o pánico político

Lo llaman, ahora, “greenlash”. El ‘greenlash’ es una respuesta que surge cuando las acciones destinadas a la sostenibilidad ambiental, social y su gobernanza se enfrentan a resistencia o escepticismo. Hace unos días ya les comenté que todos los objetivos ambientales europeos se están diluyendo en cuanto las tractoradas han asomado.