El expresidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol i Soley, y su mujer, Marta Ferrusola Lladós, tendrán que comparecer el próximo 10 de febrero ante el Juzgado Central de Instrucción número 5. El fiscal va a intentar demostrar que éste es un matrimonio de supuestos delincuentes a gran escala. Pero, ¿qué datos tiene el fiscal para esa comparecencia judicial? Extraconfidencial.com les revela las claves de la declaración de los Pujol ante el juez de la Audiencia Nacional José de la Mata Amaya.
La Fiscalía de la Audiencia Nacional pidió la comparecencia judicial del matrimonio Pujol-Ferrusola y el juez José de la Mata ha fijado la fecha del 10 de febrero para unas declaraciones fundamentales sobre la supuesta corrupción institucional en Cataluña. La fiscalía cuenta con numerosos datos contra el matrimonio Pujol-Ferrusola y sus hijos y va a lanzar contra la familia al completo toda su artillería pesada dentro de las Diligencias Previas 141/2012. Pero, ¿cuáles son esos indicios para imputar a Jordi Pujol y Marta Ferrusola por un presunto delito de blanqueo de capitales?
Tras leer el escrito del fiscal y las documentos incluidos en el sumario, el juez José de la Mata asegura que «se desprenden indicios» que permiten afirmar» que hay una «aparente profusión de datos» que justifican que el matrimonio declare en la Audiencia Nacional. Para el juez, esos datos «permiten deducir la existencia de patrones de comportamiento, pautas de actuación, instrumentos y herramientas empleados para generar, ocultar y blanquear activos, y los elementos organizacionales subjetivos, objetivos y de la acción empleados por la familia» para manejar toda la estructura que supuestamente montaron.
Los datos del entramado familiar
- Según el juez, Jordi Pujol Ferrusola, hijo de Pujol, y su mujer, Mercé́ Gironés Riera, son titulares de varias instrumentales como Iniciatives Marketing i Inversions, Project Marketing Cat, Active Traslation e Inter Rosario Port Services, que «no producen valor real añadido alguno, y cuya única utilización ha sido canalizar capitales de presunto origen criminal para realizar inversiones y gastos en España y en el extranjero».
Esas sociedades facturaron (indiciariamente) más de 11 millones de euros, supuestamente por tareas de asesoramiento, consultoría e intermediación a un conjunto de empresas que tienen como denominador común que, en su mayor parte, su cifra de negocios principal proviene de la explotación de concursos, proyectos y licitaciones con el sector público, especialmente de tipo urbanístico. Pero «en ninguno de los casos se ha aportado el más leve indicio que justifique la preparación, realización o seguimiento de ninguno de los trabajos de asesoramiento, consultoría e intermediación para los que se simuló la contratación de Jordi Pujol Ferrusola».
Por el contrario, existen «indicios de que Pujol Ferrusola utilizó entramados societarios internacionales, manejados por el gestor fiduciario Rainford Towning, diseñados con la específica finalidad de repatriar y blanquear capitales fuera de España«. Y ese entramado societario internacional «dispuesto para el blanqueo de capitales» se utilizó también por el hijo de Pujol para «canalizar capitales ocultos en Andorra, con origen también en muchos casos en la percepción de comisiones«.
Parte de estos fondos acabaron en poder de posiciones tituladas por:
– BRANTRIDGE HOLDINGS LTD. Es el caso de los 470.454,07 USD que, en febrero de 2009, se ordenó se transfirieran a la cuenta del BANK OF IRELAND con numeración GB69BOF19023973610101150.
– También la compañía BRANTRIDGE ESTATES INC tenía al menos una cuenta corriente en Estados Unidos en el INTERNATIONAL BANK OF COMMERCE, donde se recibieron por orden de Jordi PUJOL FERRUSOLA 705.662 USD procedentes de Andorra.
– Por último, la sociedad BRANTRIDGE ESTABLISHMENT remitió́ en los años 2005 y 2006 aproximadamente 450.000€ desde cuentas en Liechtenstein.
Ahora bien, el juez afirma que «en relación con muchas de estas operaciones, existen varias personas que podrían haber ejercido la función de testaferros y/o fiduciarios». Y el juez destaca también que los vínculos existentes entre los miembros de la familia Pujol-Ferrusola («obviamente más allá de los familiares»); sus pautas comunes de actuación; la coordinación de actividades; la asignación de roles; la distribución o reparto de cantidades multimillonarios entre todos ellos en función de los ingresos que se recibían en las cuentas bancarias ocultas que mantenían en jurisdicciones extranjeras, y el particular sistema de rendición de cuentas existente para controlar esos repartos de fondos, «revelan la existencia de un patrón de comportamiento reiterado durante años por los miembros de la familia, que apuntan elementos básicos de una organización cuyos perfiles definitivos están aún bajo investigación y pendiente de calificar».
- En segundo lugar, Jordi Pujol Ferrusola y su mujer Mercé́ Gironés Riera son titulares en Andorra de una serie de cuentas corrientes cuya existencia negaron y que la investigación judicial ha puesto de manifiesto. Pero el resto de los miembros de la familia «también han resultado ser titulares de cuentas bancarias en Andorra» y que presentan abonos en efectivo «de origen desconocido, que no pueden asimilarse a una actividad legal, y abonos por transferencias o traspasos que en algunos de los casos que han podido identificarse se relacionarían con personas que desarrollan una labor empresarial entroncada con el sector público en Cataluña».
Dice el juez al respecto: «Parte de esos fondos han sido distribuidos por Jordi Pujol Ferrusola entre todos sus hermanos y su madre, en cantidades iguales o similares, y generalmente en momentos coincidentes con ingresos de origen desconocido verificados en las cuentas corrientes de aquél, de lo que tampoco consta acreditada razón alguna para ello. Tal distribución se hizo mediante transferencias a cuentas bancarias de todos y cada de uno de ellos en la misma entidad bancaria andorrana».
En concreto, el fiscal ha descubierto que Pujol Ferrusola «ordenaba que se realizaran traspasos a sus cuentas de Andorra a sus hermanos Oleguer, Oriol, Josep, Pere, Mireia y Marta Pujol Ferrusola, todos ellos titulares de cuentas en esa jurisdicción. Estos movimientos beneficiaban afectaban también a la cuenta titulada por su madre Marta Ferrusola Lladós, también beneficiaria de algunos de estos repartos».
- Existencia de la cuenta número 63810, abierta en el año 2000 en la Banca Reig. En el documento de apertura de la cuenta figura como titular de la misma Jordi Pujol Ferrusola, la cuenta tiene la característica de Individual y existió una primera partida de ingreso cifrada en 307.000.000 Ptas. En el extracto de esa cuenta número 63810 (TOMO 4 de la CR F 1404 y siguientes), figuran movimientos de fondos desde su apertura hasta el 30.12.2010 en que se deja el saldo a «cero».
En relación a esa cuenta, constan también en la causa dos documentos remitidos por la entidad bancaria:
– Uno firmado por Jordi Pujol Ferrusola, fechado el mismo día de la apertura de la cuenta, en el que explica que él no es dueño de esos fondos que se ingresan, y que el real titular de ellos es Jordi Pujol Soley.
– Un segundo documento, manuscrito de Jordi Pujol Soley, fechado en mayo de 2001, en el que afirma ser propietario de la cuenta número 63810 y declara que, «para el caso de su defunción, todo lo que haya en esa cuenta ha de pasar a Marta Ferrusola Lladós». El documento está firmado por Pujol Soley de dos formas, su propia grafía y el número de la cuenta manuscrito y en letras, tal y como consta en la cartulina de firmas ya referida.
Además, según el juez de la Audiencia Nacional «no consta la realidad del legado hereditario» que mencionó Pujol Soley en su declaración exculpatoria «y el comunicado referido es en sí mismo un mero relato, sin contenido determinante alguno».
Un patrón de comportamiento supuestamente delictivo
Para la Fiscalía, no hay duda: esas operaciones revelan de nuevo la existencia de «un patrón de comportamiento reiterado durante años por los miembros de la familia, que apuntan nuevos elementos básicos de una organización cuyos perfiles definitivos, como se ha indicado, están aún bajo investigación y pendiente de calificar».
Ahora bien, el reforzamiento de los sistemas de prevención de blanqueo de capitales habría obligado a la familia Pujol a que «avanzaran en la metodología utilizada para canalizar los ilícitos y comenzaran a utilizar sociedades instrumentales para el cobro de las comisiones ilícitas, porque además éstas eran más sencillas de generar para los pagadores, teniendo además beneficios fiscales, al ser considerado como un gasto y soportar IVA».
«Blanqueo de capitales continuado»
Todas esas operaciones, y en lo que se refiere ahora a Jordi Pujol Soley y Marta Ferrusola Lladós, «podrían integrarse en el tipo de blanqueo de capitales continuado del art. 301 en relación con el art. 74, ambos CP».
Fiscalía y juez indican expresamente que «no consta negocio jurídico alguno que justifique esos incrementos patrimoniales» en Andorra, sino que «existen operaciones financieras anómalas y movimientos financieros que, por tratarse de efectivo, ponen de manifiesto operaciones extrañas a las prácticas comerciales ordinarias».
Se han constatado, además, los siguientes aspectos:
– Muchas de las empresas que suscribieron tales contratos y que realizaron tales pagos directamente o mediante testaferros, tienen en común que han sido y son adjudicatarios de contratos de servicios y obras públicas.
– Existía una acuerdo entre las partes para atribuir a Jordi Pujol Ferrusola el rol de gestor y distribuidor de los recursos entre los hermanos y su madre.
– Ha quedado acreditada la existencia de complejos entramados societarios en distintas jurisdicciones, manejados por testaferros, sin objeto social y actividad societaria aparente;
– Ha quedado evidenciada la apertura de cuentas corrientes sin finalidades comerciales o societarias aparentes en distintas jurisdicciones, muchas de ellas paraísos fiscales.
– Distribución de enormes cantidades de dinero entre miembros de la familia/organización, sin causa aparente, con causas improbables o con explicaciones y/o coartadas no justificadas mínimamente.
Para el fiscal, no hay duda: resulta provisional e indiciariamente que Jordi Pujol Soley y Marta Ferrusola Lladós «pudieron tener participación en los hechos objeto de investigación en este causa».
Todos esos aspectos son los que la Fiscalía quiere esclarecer en la comparecencia del matrimonio Pujol-Ferrusola del próximo 10 de febrero en la Audiencia Nacional.